Infinitamente príncipe:
Quizas sea un problema el pensar que este súper héroe contemporáneo se haya dado cuenta de la realidad a la cual se había dispuesto a vivir.
Este ozado joven no es más que mezcla de “resentimiento” y “lucracion personal ingenua”.
Nunca se dio el trabajo de comprender muy bien las cosas, una jugarreta cruel de los sentidos, una verdad a medias que ni si quiera socavo completamente pues en su mente habían solo buenos sentimientos, el amor, la discordia, la completa naturaleza, la afectiva necesidad de amar sin saber y lo absurdo del sentimiento que poco a poco se preocupo de conocer, sentimiento o no, verdad o no, una clave distinta de las que ya conocía, su realidad plasmada en unas paginas de un aviador que con solo conocer su realidad, se ocupo de enseñar como vivir plenamente con una lonchera de agua.
La ficción utilizada por el autor no nos da espacio a creer que se esta viviendo en la misma, dando espacio solo a lo memorable que puede ser estar inmerso en comparaciones que solo tienen un índice de blasfemia, que no se pueden refutar con nada al ser tan ciertas y acertadas, realmente es tan falso lo que nos menciona en este libro “infantil”, no se gracioso, tampoco es completamente cuerdo, los recursos utilizados de un hotel que en su mesa de noche solo posee una Biblia y pensamientos entrelazados por parte de nuestro autor.
“Caminando por una línea recta, no pude uno llegar muy lejos”, pues esta vertiginosa verdad no puede hacerme mas que pensar que uno al momento de adquirir nuevos conocimientos se va haciendo curso a una nueva realidad, diariamente, continuamente, desglosando pedazos de verdad que no harán mas que desviarnos de nuestra senda, no puede ser completamente mal el curso que decidamos seguir, pero si variable y no queriendo decir que sea bueno tomarlo, tampoco es medianamente bueno el no seguirla, al adquirir mas conocimientos, de nuestra realidad nuestra verdad, de nuestros pensamientos nuestros sentimientos y de nuestra victoria nuestra historia.
"No se debe nunca escuchar a las flores. Sólo se las debe contemplar y oler. La mía perfumaba mi planeta, pero yo no era capaz de alegrarme de ello." Pues que a veces las cosas mas pequeñas son las que nos sorprenden y no somos capaces de darnos cuentas de ello, nuestra misma verdad se pone en juego, tantos años de vivir con los ojos vendados, salir de nuestro metro cuadrado, encerrados en nuestra habitación, entonces luego vez la verdad, esa que te privaba de ver el sol, cuando empiezas a caminar no es uno que se esta cansando, es el sofocamiento el que nos toma por no haberlo hecho antes, notar este tipo de cosas nos es aun mas cansador, hay que saber mirar al lado, ver que nadie se cubre su rostro y sorprendernos de que nosotros lo hayamos hecho alguna vez, queremos enseñar lo que nos ocurrió, mostrar nuestra realidad y nuestro crecimiento, recurrimos nuevamente a la senda hecha, pero no es nada fácil.
El zorro, dejo una estela de irrealidad en el Principito, ayudándolo a ver que es lo que realmente tenia importancia, lo tuyo, no lo mío, si no que lo mismo propio del sentido comun de la realidad, hay que domesticar para poder querer, hay que ver la nueva realidad, recurriendo nuevamente a la sinceridad, ayudados y guiados de una sinceridad las cosas se tornan algo mas sencillas, algo mas que un ser implícito, que contradictoriamente es parte de el con el ser, todo su haber, todo su poseer lo otorgamos al ser, sin pensar que somos lo mismo, sin creer que somos nosotros mismos.
Me cuesta entender como puedo vivir sin su amor, aunque teniéndolo al lado no lo pudo ver, aunque pensándolo bien lo pudo tener y mas aun la poseía completamente y eso que el tipo no era ningún demente, mas bien el error que cometió fue el haber seguido la línea recta, recurrencia nuevamente, pues nada que el no haya podido notar mas tarde.
Cuando miramos al lado, vemos lo que puede considerar todo nuevamente
“me creía rico y no tenia mas que una rosa ordinaria”, era una única rosa, una y nada mas que el solo compartía con el, era única, su ser implícito, su único ser en el mundo.
“Para el mundo puedes ser solo una persona, pero para una persona puedes ser su mundo”, su mundo era su mundo, decidió compartir su mundo, dejo todo en sus manos y se marcho, abandonando el lecho y hablando con un zorro que lo ayudo a ver que era realmente su mundo y todo lo que podía ser parte de el si se dedicaba solamente al mundo, su mundo, mi mundo, mi realidad y su realidad, plasmadas única y exclusivamente por una sola realidad, compactadamente, y “febrilmente” tranquila.
Como un “perro andaluz”, su inmortalidad, se ha hecho notable por su cruda y verdadera muestra de la vida tal como es, mostrándonos lo mal que estamos el desenfoque de una sociedad ajetreada, me he preguntado muchas veces la terminología de esta palabra “ajetreada”, quizás tenga algo que ver con “ajedrez”, la justa de mi pensamiento se apoya en que en todo sitio tiene que haber un lugar para el mismo, todo tiene que estar en una coalición que se defiende sola, toda nuestra sociedad batallando a diario por la culpa de nuestras posiciones quizás ascendentes o en decadencia, crecemos como se crece, y queremos vivir como se tenga que vivir, sumiéndonos en solo quedarnos ahí, inquietándonos solo con golpes que quizás nos ayuden a crecer, el concepto de peón, que puede ser coronado, nos ayuda a creer en que nuestro futuro esta en nuestras manos, lo grande que podemos ser, pero nos frenamos y nos damos cuenta que estamos retomando la virtuosidad del subordinado, quedándonos nuevamente en el sitio que ocupo nuestro predecesor, confiando todo lo que hemos logrado en manos de alguien que quizás nos quiera ayudar alguna vez, solo si lo desea, como puede ser posible que lo hayamos ayudado tanto y nos haya dado tan poco, y de a poco también notamos nuestro error.
Quizas el suicidio haya sido nuestra mejor opción desde un principio, peleando solo nuestra batalla no hubiésemos dañado a nadie solo que a nosotros mismos, como puede ser estos cierto si nuestro personaje decidió por cuenta propia acabar con su vida, creyendo en las palabras de una víbora, creyendo que seria mejor el cobijarse en su muerte para poder ocupar el sitio que quiso desde el principio vivió, volviendo, retrocediendo, llegando hasta el fin de su batalla, atacando a quienes lo atacaron para poder llegar a vivir nuevamente, en el transcurro su pelea rígida, descorazonada que solo le dio como fruto darse cuenta de cómo era feliz, de cómo era real, de cómo ya no podía retroceder sin perder.
Tacaño como el hombre de negocios no quiso perder, eso quizas lo aprendió bien, aprendió bien también cuando detenerse, la conversación de este tipo de hombres lucrativos y autosuficientes nos enseña que no todo lo que logran lo hacen por placer, si no que no tienen que hacer mas que hacer, y dentro de todo su quehacer personal le dan lugar solo a lo que ellos estiman “pertinente”.
Algo de lo que me puedo dar crédito en estos momentos es el de haber escrito a lo largo de mi vida cosas que para mi son “pertinentes” para crecer, como el haber creído que “las memoria de mi cigarro”, son escasas para plantear que la realidad misma de las cosas esta sufragada por tapones que ponemos al andar, que porque no podemos ser felices otorgándole importancia a lo que creemos importante, creer en nosotros mismo es algo que esta amenamente correlacionado con nuestro andar, nuestro poseer, nuestra garra para dar patrones seguro de que nuestra realidad es propia e inigualable.
A veces me cuestiono si realmente no sabia que había dentro de la caja, si el tipo leía los pensamientos, o que solo dibujó para callarlo de una vez, pero me pongo en la situación y mis buenos pensamientos y sentimientos se hacen presentes, si hubiera sido yo no hago mas que dibujarle una oveja perfecta, pero de que le hubiese servido si no tenia como domesticarla, las grandes tareas comienzan en casa y en casa mismo me doy cuenta de lo que estoy haciendo, aunque no me pueda esconder en una caja voy a poder encerrarme en mi ser para crecer y dar a entender que cuando yo quiera voy a poder salir de ella mostrando mis mutaciones, que no físicas o intelectuales podré notar que son mismas y distintas a lo que poseía, egoísmo grande nuevamente al solo quererme ver yo con mis cambios y no como los cambios encandecen el pensamiento popular de quienes se han visto afectado por mis cambios traspapelados que me han hecho cambiare una y otra vez de “rumbo”, desvariando de senda, promoviendo la frase de que siguiendo el mismo camino no llegare muy lejos, pues para ostentar esto puedo encogerme nuevamente de hombros y esconderme en mi caja, para salir nuevamente y ver quien quiere ver.
Al ser la oveja negra quizas la situación se pueda tornar algo difícil pero no por se descorazonado pueden venir a juzgar que es bueno acribillarse con el lanudo ser y comértelo hasta digerirlo y quizas como fue tan asqueroso en su realidad deglutirlo y asquearse de comérselo, una buena oveja es una buena oveja criada, domesticada, solo así podrá ser bien masticada, digerida y defecada.
Aunque un poco de condimento al asunto no le puede si no que mas restar importancia desvirtuada al ser, quizas el borracho le dejo una mala impresión como quien dice “nunca hay una segunda oportunidad para dejar una primera impresión”, nunca supo de su pasado ni de lo que había sido antes, si no que siembre fue así, desde nacer hasta nunca morir, un recuerdo inmemorable de lo desgraciada que puede ser la realidad de esa persona, que no hacia mas que beber y beber para luego volver a beber, cayendo así en lo mismo una y otra vez, olvidándose de si mismo, alejándose de su realidad, excusándose en el alcohol tampoco llegara muy lejos, su camino de vanalidad y austeridad solo quedo marcado por lo difícil que logro coger el “toro del mango del sartén por las astas”.
No es necesario ni prescindible ahondar en detalles lúgubres de su vida, no es necesario tampoco el no querer mencionarlo por ser una de las bajezas mas grandes que posea el hombre, por ser una de las carencias mas susceptibles a ser tomadas y renegadas de quien se ha consumido en esta frivolidad, algo escasea en esta ocasión, el querer ser mas y el no poder ser mas, es gracioso pero comparado a un oso, no nos hace creer que lo que creemos verdad pueda llegar ser falso, que nuestros sueños componen una décima de parte de lo que vivimos, de lo que estamos haciendo solo por extrañamiento, me suena a raro el creer que lo que hacemos por inercia lo hacemos por gusto y que
nuestras reacciones se limitan a “cereblares, métricas y físicas”, que la métrica es el médium para llegar a una y que nuestro inicio empieza en nuestro ser y que nuestro fin acaba en lo físico, este ultimo, el físico, pues no descansa en paz hasta estar conforme consigo mismo, nuestro físico nos ayuda a ver que somos, nuestra apariencia externa, no puedo andar por la calle con un cartel que diga que soy católico, que soy creyente o que soy un poco inteligente, “la inteligencia no es la gran cosa si se piensa que es solo decir una estupidez para luego decir lo contrario”, es grato ver que tan bien y a gusto se desenvolvía el principito con su cuerpecito en un desierto que solo le brindo la posibilidad de tomar agua, morir por envenenamiento y de crecer como amigo , esto ultimo fue su salvación, su medio para acabar a su físico de cuerpo recordando que su inicio fue el haber viajado, su cerebro que lo llevo a su amigo que lo guió a la muerte.
Merito o no lo ayudo a crecer, desgarrando de sus enseres los mas preciados, el de querer pensar y el de querer aprender, el pensamiento a veces es algo ilógico, muchas veces notamos que algo que se ve tan bueno es tan malo pero que sin embargo lo hacemos, como podemos llegar a este punto tan perdido, pues no se sabe el estar tan metido ensimismado en que lo bueno puede ser malo y que lo bueno es malo, es creer desde el primer avistamiento que lo que realmente nos llena es ver el lado negativo de las cosas ingenuamente, cautelosamente teniendo y queriendo en el poder de la mente.
Ahora que estoy sin ti, flor de mi corazón, ahora me di cuenta de cuanto es que nos necesitábamos, de cuan dócil era flor de mi corazón, ahora que estoy sin ti me doy cuenta de lo que perdí, ahora que no te tengo que te quiero poseer, ahora que mi apasionado dolor se me clava con tus tres espinas de mi universo que veo como una realidad ficticia que me ayudo a crecer, mi cinturón de cuatro astas mi corazón de Jesús envuelto en tu corazón, eso ha de haber pensado el principito cuando acabo de comprender todo lo que le había enseñado el zorro, lo solo que se sintio sin el , que tenia lo que quería pero no lo que necesitaba.
Volver al principio para empezar a vivir lo que era ser feliz, se sintio ofuscado sin represiones ni mucho menos, pero el se castigada sin saber lo que iría a suceder.
Infinitamente un príncipe que estaba dispuesto a labrar su camino con un incierto destino, el alfarero como cuota de gracia lo prendió de sagacia y desgracia, si no hubiese sido por el quizás cual hubiese sido el final de nuestro personaje, viéndose reflejado en su lealtad y responsabilidad, no le dio mas opción que ver en este raro ser un nuevo poseer, la verdad ante todo y la responsabilidad ante ella que lo dejaba como un completo incompleto, razonando si había tomado buenas decisiones en su vida, como ejemplo de una gloria no valorada el alfarero solo pedía a cambio de todo lo que
daba las mas estúpida de las beneficencias, absolutamente nada, es el fin de una vida sana y llena de logros personales, satisfacciones que solo harían de el una mejor persona, que solo lo llenarían de honradez y humildad, sin embargo el esperaba mas de la vida, mas que prender y apagar un farol de vez en cuando, podría haber sido con su rosa al lado, pero sin ella se sentía incapacitado de verdad de ver lo que era por ese entonces su total realidad, aunque nunca lo supo, algo total es algo que acaba, y la única totalidad de este asunto es que el dispuesto joven no quería verse envuelto en el sarcasmo y solo que lo único que tendría totalmente acabado seria el recuerdo que dejaría en una rosa, un zorro y un aeronauta tan experimentado que se estrello en pleno desierto.
Un hombre sin ego no es hombre y un hombre con demasiado ego no puede llegar a ser menos que una mitad de un hombre, pienso eso que tal vez o quizás siempre las personas se ayudan a si mismos con positivismo, esto es infinitamente razonable si nos ponemos a pensar en el experimento de “what the bleep do we know” (o que diablos sabemos acerca de nosotros mismo), un japonés descubrió que si le hablábamos al agua de buena manera sutilmente se transformaran en moléculas de cristal bellos y en cambio si la tratamos mal se transformara en una acérrima semejanza de aceite hirviendo, es razonable porque si pensamos que el 90 por ciento de nuestros cuerpos están formados por agua, es algo que deja una gran ventana por pensar, si tenemos fe en nosotros llegaremos lejos, si no, pues nos quedamos donde estamos y acabamos con nuestra naturaleza, también cabe rescatar que dos tercios de la tierra están formados por agua, quizás nuestra salvación sea tener un dios de los líquidos y los fluidos, pidiéndole encarecidamente que termine con sus arrebatos de catástrofes, es una opción, la otra es dejar de ser tan vanidoso, quizás si somos lo suficiente nuestra agua se transforme en nieve, cristalizando de por vida nuestra sangre, ejecutándonos y rompiendo todo nuestro cuerpo, el positivismo medido quizás sea la clave y los desequilibrados llamados “hipéis” sean los mas correctamente sanos físicamente, lo mas probable es que ellos sean los responsables de que tengamos lideres tan elocuentes que actúen como mediadores de “una sana convivencia”, opositores a todo y los mas involucrados en todo, inconcientes de no saber que es lo que quieren realmente, tal vez sea una respuesta, le dan algo de alegoría y realidad al mundo, con una identidad que solo ellos saben razonar, gracias hipíes???,
Con cautela se logran muchas cosas pero con perseverancia y cautela se llevan bien ambas de cualquier manera, llegando lejos, solo o que no puedan vislumbrar nuestros ojos, enseñándolos que lo que vemos no es todo lo que tenemos y lo que tenemos no es nada comparado con lo que podemos tener, es un sentimiento racionalmente igualable a lo que llamamos “progreso”, quizás ahí esta la clave del éxito maduro apropiado, pero realmente es lo que queremos o lo que necesitamos, en ciertas ocasiones es lo mas razonable y lo que se debe hacer pero no lo que queremos hacer, es distinto pero igual y a la vez es inigualablemente horrible.
No hay que poner en tela de juicio a quienes han ozado vivir una vida en rasocinio a lo que ellos concideran letal para el bien comun, el geografo que ayudo a ubicarse al principito en el untimo transurso de su viaje le dijo que no era importante su rosa ya que era un ser efímero, al oir esto el principito se sintio muy trizte al saber que su rosa moriria algun dia, no así con el ni con su planeta que podria ser destrozado en cualquier momento por una hierba mala que crecia en todo el planeta, el no hacia nada en si, solo se preocupaba de acabar con la maldad que reinaba en casa espacio y rendija de alguna piedrecilla en el suelo, si bien nosotros no tenemos es amenza, nosotros acabamos con el planeta de igual manera, pero cortando los arboles, como es posible que acabemos con un recurso que es nuestro principal pulmon, ayudan a respirar, el autor quizas no penso en esta variable, aunque tal vez si, y lo penso bien, creyendo que lo suyo era remober los escombros de una sociedad que aun yacía en llamas, no pudo si no pensarlo una vez creyendo que seria lo mas justo, una reprimenda de tan grandes magnitudes no hace mas que poner en una balanza lo mal que hemos sido con nuestro entorno y lo bueno que ha sido el con nosotros, la sutileza con la que se trata el tema no nos hace acomplejar, lo dejamos de lado, y de alguna u otra forma lo que creemos, es lo mas cercano que tenemos para ver y no lo podemos creer.
Se enfureció cuando le dijo que era solo una flor, pues para ese entonces el principito ya había charlado con rosas, con un zorro y este ultimo lo había ayudado a comprender que no todo lo bello es igual ni que depende cuando y cuanto puedas mirar si no que hay que saber apreciar, el principito ya se sentía suficientemente feliz de haber logrado tal hazaña, ya nada bastaba para el amor, ya nada quedaba del amor mas que el mismo amor.
"Las personas mayores nunca son capaces de comprender las cosas por sí mismas, y es muy aburrido para los niños tener que darles una y otra vez explicaciones", esto si que es gracioso, como va a venir a decirme un pequeño lo que es realmente lo que creo si no me conoce ni sabe lo que pienso, pues es que el ve la simpleza de las cosas a diario en cualquier detalle, por ridículo que sea el ser detallista de mayor lucro a lo que uno va ganando, le da mas prestigio a nuestra historia que es nuestra razón de ser, y el estarte pendiente de lo que haces te va a ayudar a no caer nuevamente en lo mismo, el no idealizar las cosas desde el principio te va a ayudar a ver las cosas con mas objetividad y pureza.
"Conozco un planeta en el que vive un señor muy colorado. Nunca ha olido una flor. Nunca ha contemplado una estrella. Nunca ha amado a nadie. Nunca ha hecho otra cosa que sumas. Se pasa el día diciendo, como tú: "¡Soy un hombre serio! ¡Soy un hombre serio!", lo que le hace hincharse de orgullo. Pero eso no es un hombre, ¡es un hongo!”, tan cierto como quien dice “valemos hongo” , pues que cuando te mueres “no somos nada” , la verdad yo creo ser algo, el principito era un ente pensante aunque errante pero pensante, agradable a la vista y condecorado al corazón, aunque lo mas “penca” seria que la única verdad que poseemos en este entonces es nuestra pequeña reseña, o la resaca después de la fiesta o la historia antes de la trama y lo aburrido de lo divertido, extrayendo el mayor desenfoque posible no se que es mas cierto si lo que quiero decir o lo que puedo hacer cuando lo estoy sintiendo, “los amores cobardes no llegas a historias ni a amores, se quedan allí”
Cuando hay que disponerse realmente a algo, pues cuando ya tenemos algo, y cuando tenemos algo, pues cuando sabemos que ya tenemos algo que tenemos, y como notamos el tener algo, a mediad que las realidades van jugando tristes y agraciadas con sus salvaciones idóneas de realidad, cuando hay una utopía presumida que queremos no quieres tener y que a pesar de todo no la tenemos, no tengo que ser un gran “sabio” para saber mi agravio, tengo que creer que no puedo tener lo que quiero para darme cuenta que es lo que creo creer y lo que quiero creer.
Es agradable poder decir que el principito ha sido un libro que mas que pasar a la historia ha sido formador de grandes “lideres”, a decir verdad quizas tenga algo de razón el zorro, domestícame se dijo, el aprendió a dominarse, pedía que lo dominaran y que lo sacaran de esa línea de vida, que lo guiasen a un sendero mas cercano a lo lejano y que lo dejaran sufrir si se alejaban de el, pero el lo sabia, lo hizo apropósito, quizás con el fin de sentirse mas fuerte, de autoproclamarse fuerte y de seguir, de hallarle sentido a los pastizales de trigo y de ver a quien quisiese ver en los sendero aledaños, era su sector, el vivía ahí, estaba dispuesto a vivir de un recuerdo pero no a vivir por alguien, recurrencia nuevamente, egoísmo nuevamente, ser guía de un pionero en la tierra, no se si sea tan adecuado cobijarse en manos de un zorro, no sea lo mas “sanamente-cuerdo” que se pueda hacer, pero no habían opciones, debía escoger, aprender de un aprendiz, o quedarse sin saber lo que era si quiera ser un aprendiz, quizás lo aprendió bien, de buena manera llego al aviador, fue lo mas cercano que conoció de la felicidad, aunque la hubiese vivido sin haberlo notado nunca, la vivió.
Aunque nuestros días los veamos y nos demos cuenta que pasan por un crepúsculo diario, quizás sea lo mas sabio el arromarle todo a nuestras sillas y los pequeñitos pasos que podemos dar a través de nuestro jardín con flores, con algo de “maleza” que se compara a nuestra vida, la tal vida.
“No se ve bien si no es con el corazón , lo esencial es invisible a los ojos”, a veces cuando nos disponeos a ver nuestra vida, hay ciertos sitios o pasajes que no nos encantan del todo en el libro de nuestra vida, muchos significados y frases inconclusas dan lugar a que no sabemos que hubiese sido de nosotros si las acabásemos de redactar, quizás lo único que bastaba en ese entonces era atreverse, nosotros vemos lo que queremos ver y cuando nos intentan enseñar algo y no prestamos atención, lo mas probable es que no lo aprendamos, pero cuando pienso en todas las aprensiones que tenia el principito con su flor me doy cuenta de que no quería si no que vivir tranquilo y sin preocupaciones como el solo, es agradable recordar que cuando uno se siente así usualmente esta solo, pero que con mirar bien y no de reojo dejando la vista a medias podemos ver todo lo que nuestros ojos quieran ver, hasta el final del horizonte y que si nos seguimos abriendo paso en nuestras vidas veremos el crepúsculo de un día que acaba de comenzar.
Aunque nuestros días los veamos y nos demos cuenta que pasan por un crepúsculo diario, quizás sea lo mas sabio el arromarle todo a nuestras sillas y los pequeñitos pasos que podemos dar a través de nuestro jardín con flores, con algo de “maleza” que se compara a nuestra vida, la tal vida.
Dato anecdótico: no tiene nada de gracioso y ficticio ver nuestra realidad tan crudamente y “linda”.
escritorio donde tantas veces veiamos cochinadas o chistes crueles por youtube el poder decirte adios
